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Ganancias potenciales al vender ropa: ¿cuánto dinero se puede ganar?

¿Cuánto se le gana a la ropa?

La industria de la moda es una de las más lucrativas del mundo, generando miles de millones de dólares al año. Sin embargo, detrás de toda esa opulencia y glamour, se esconde una realidad mucho menos brillante: la explotación laboral y los bajos salarios de los trabajadores que forman parte de esta cadena de producción. En este artículo, analizaremos cuánto se le gana a la ropa, desde los costos de fabricación hasta el precio final en las tiendas, para entender mejor la desigualdad que permea esta industria.

Costos de fabricación

Los costos de fabricación de la ropa varían dependiendo del tipo de prenda, los materiales utilizados y el país en el que se produce. En general, los salarios de los trabajadores de la confección suelen ser muy bajos, especialmente en países en vías de desarrollo donde las leyes laborales son más laxas. Según un informe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), el salario mínimo para los trabajadores de la confección en países como Bangladesh o Camboya es apenas suficiente para cubrir las necesidades básicas de una persona y su familia.

Además, las condiciones laborales suelen ser precarias, con jornadas extenuantes, falta de medidas de seguridad y salud en el trabajo, y a menudo, el incumplimiento de los derechos laborales básicos. Todo esto contribuye a que los costos de fabricación sean muy bajos, lo que permite a las grandes marcas obtener grandes márgenes de beneficio a expensas de la explotación de los trabajadores.

Marcas y minoristas

Una vez que las prendas son fabricadas, estas son vendidas a las marcas o minoristas que las comercializan en sus tiendas. Aquí es donde comienza a agregarse valor a la ropa, ya que las marcas incorporan costos por diseño, marketing, distribución y otros gastos administrativos y comerciales. Aunque estas actividades son necesarias para el funcionamiento de cualquier empresa, algunos críticos de la industria argumentan que los márgenes de beneficio de las marcas de moda son excesivos, especialmente si se tiene en cuenta el origen de los productos y las condiciones laborales de los trabajadores.

Otro factor a considerar es el costo de la publicidad y el marketing, que suelen ser sumamente elevados en el mundo de la moda, con campañas millonarias y celebridades como embajadoras de marca. Estos costos, a menudo se trasladan al precio final de la prenda, lo que hace que los consumidores terminen pagando por la imagen y el prestigio de la marca, además del producto en sí.

Precio final para el consumidor

Una vez que la ropa llega a las tiendas, el precio final para el consumidor puede variar considerablemente. Las marcas de lujo, por ejemplo, suelen tener precios mucho más altos que las marcas de fast fashion, a pesar de que los costos de producción pueden ser muy similares. Esta diferencia de precio se explica en parte por la exclusividad y el estatus que se asocia con las marcas de lujo, así como por la calidad de los materiales y la mano de obra utilizada en la fabricación de las prendas.

Por otro lado, las marcas de fast fashion se caracterizan por ofrecer ropa a precios bajos, lo que puede resultar atractivo para un consumidor promedio. Sin embargo, este modelo de negocio se basa en la producción masiva y la reducción de costos en todas las etapas de la cadena de suministro, lo que a menudo implica salarios más bajos para los trabajadores y una mayor presión sobre el medio ambiente.

El impacto del consumidor

En última instancia, el precio que se le gana a la ropa depende en gran medida de las decisiones de compra de los consumidores. Las marcas y minoristas responderán a la demanda del mercado, por lo que si los consumidores exigen prendas más éticas y sostenibles, es probable que las empresas se vean obligadas a cambiar sus prácticas.

Cada vez más consumidores están prestando atención a las condiciones laborales de los trabajadores que fabrican su ropa, así como al impacto ambiental de la industria de la moda. Esto ha llevado a un aumento en la demanda de marcas éticas y sostenibles, que se comprometen a pagar salarios justos, garantizar condiciones laborales seguras y reducir su huella ambiental. A medida que esta tendencia crece, es posible que las marcas que no cumplan con estos estándares se vean obligadas a cambiar su manera de operar, lo que podría conducir a mejores condiciones para los trabajadores y un impacto ambiental reducido.

Conclusiones

¿Cuánto se le gana a la ropa? La respuesta es compleja y multifacética. La industria de la moda es una de las más lucrativas del mundo, pero a menudo a costa de la explotación de los trabajadores y el medio ambiente. Los costos de fabricación son bajos, en gran parte debido a los bajos salarios y las malas condiciones laborales de los trabajadores de la confección. A medida que la ropa se mueve a lo largo de la cadena de suministro, se agregan costos por diseño, marketing, distribución y otros gastos, que se reflejan en el precio final para el consumidor.

Sin embargo, el poder está en manos de los consumidores. Al exigir transparencia, ética y sostenibilidad en la industria de la moda, los consumidores pueden influir en las prácticas de las marcas y minoristas, lo que a su vez puede conducir a un cambio significativo en la manera en que se produce y se comercializa la ropa. Al tomar decisiones de compra informadas y apoyar a las marcas que se comprometen con valores éticos y sostenibles, los consumidores pueden contribuir a crear un futuro más equitativo y sostenible para la industria de la moda.

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